¡Que sí! Entiendo todo eso del porno ético y demás, pero ¿Quién no ha flipado masturbándose viendo porno? ¿Somos las personas menos personas por consumir los servicios de las trabajadoras sexuales?
¡Bienvenido al mundo de la doble moral! Haters, adelante, podéis odiarme.
Llevo meses leyendo en twitter y demás plataformas a personas con falsa moral hablando de lo que es ser una trabajadora sexual. Encuestas de violaciones, ITG(s), y cómo no, personas asegurando que ellas son menos feministas por ellos. Me gustaría saber si alguna de estas personas le preguntó a una trabajadora sexual acerca de la prostitución o el porno.
Esta profesión es sin duda alguna de las más estigmatizada. Es normal que todavía sigamos en esta rueda de no entender esto que te digo. Todo el mundo nos ha dicho con mensajes más o menos claros, “pobrecitas las prostitutas, tenemos que salvarlas”. Sin ir más lejos la reina de Hollywood, Pretty Woman. Hombre rico se va de putas para salvar a la bella desgraciada que ejerce la prostitución porque no puede hacer otra cosa. Ella con ojos de esperanza y fe lo deja todo por él. ¡Claro que sí! Eso es ser una mujer libre, empoderada y por su puesto un claro ejemplo de igualdad. ¡Vete a sembrar pimientos, hombre!
Me encantaría ver una película dónde una puta, por lo tanto una mujer libre y empoderada, salva al sexy man de su estresante trabajo. ¡Ah, no! Eso no va a ocurrir. ¿Por qué? Pues porque la puta siempre será la pobre desgraciada. ¿Por ser puta? No, por ser mujer ;)
¡Amén!
Yo no he sido trabajadora sexual pero si he vendido un servicio donde requería mostrar mi cuerpo. Que ¡ojo! Esto es muy diferente a vender mi cuerpo. Nosotras NO vendemos nuestro cuerpo ;) ¿O acaso el bailarín vende sus piernas o el matemático su cerebro? No puedo con tanta ignorancia, de verdad.
A lo que iba. También me he encontrado con muchos clientes que me han visto con ojos de compasión, han tratado de empatizar con mi situación, e incluso han pretendido «salvarme» de los suburbios mundos de las stripers. Pero su doble moral le hacía darme lecciones de vida mientras pagaba (y además mucho dinero) por una pobre chica que mostraba su cuerpo porque no podía hacer nada más en la vida. ¡Pobre de mí! (nótese la ironía)
Pues también puede ser y también he escuchado comentarios al respecto. Parece que sólo los «mortales» pueden ir al trabajo pensado la mierda que les espera. –Que tocada de narices pasar 8h en una oficina, sirviendo copas, dirigiendo una empresa o llamando por teléfono para que cambien de compañía de seguros. ¡Joder! No quiero que llegue el lunes, mi vida es un infierno.- ¡Claro que si! Es normal, y además muy comprensible. Todos prefiríamos estar en las Maldivas todo el año. Algunos tenemos la suerte de adorar nuestro trabajo, pero eso no hace que todos los días tengamos ganas de ir a trabajar.
¡Aaahh, amiga! La puta no. Las trabajadoras sexuales no pueden quejarse ni un poco. Ellas deben / tienen que ir contentas y felices a su trabajo todos los días. Por eso son PUTAS, porque no tienen nada mejor que hacer con sus vidas y además lo hacen porque les gusta. ¡Que se jodan!
¿Que no tienen ganas de trabajar? Todos le diremos que eso es denigrante y una violación.
(nótese la ironía) Espero que lo hayas entendido.
Nuestro deber no es hablar continuamente de aquello que no sabemos y mucho menos hablar de las trabajadoras sexuales para crear clickbait (que también lo he visto).
Adoro todos los movimientos (feminista, LGBT+…). Aunque parezca mentira la sociedad ha empatizado muchísimo y cada vez somos más los que luchamos por lo derechos de la personas. Pero es realmente surrealista que no apoyemos a las trabajadoras sexuales o peor aún que consideren que no se puede ser puta y feminista. El mundo se va al garete con la doble moral.
Esto es sencillo, ¿porqué no remamos todos en la misma dirección? Pues porque no interesa. Si, lo que lees, NO INTERESA. Detrás de todos los movimientos de buena fe hay un sistema capitalista frotándose las manos. «Tú deja que se maten entre ellos, nosotros mientras cobramos».
Te invito a que reflexiones sobre ello si no lo habías hecho hasta ahora. Deja de lado tu mirada de pena y compasión. Mira a las putas como lo que son, personas. Y sí, llámalas PUTAS, porque lo son. Lo sé, lo sé… ¿cómo voy a llamar putas a las pobres chicas? ¡Já! Lo ves, una vez más te han traicionado tus prejuicios. Te has pasado años y años refiriéndote a las mujeres cómo putas, ahora has adoptado esa profesión como un insulto. Repito, que no te sepa mal. Ellas son putas, los únicos que tienen un problema son aquellos que tienen que cambiar el concepto de la palabra.
Ellas (las putas) ya son mujeres libres y empoderadas. Ahora te toca ti.
¿Pero what about las mafias, la explotación, la violación…? De eso hablaremos otro día.
Ya paro. Esto es too much para ser un blog «erótico».
Queridas putas, estoy con vosotras. #SexWorkisWork @YaizaRedLights (Click para tuitear)
Eva XX
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Comentarios
Un artículo de diez, como muchos que he visto por aquí, soy nueva y la verdad es que tus artículos me han atrapado en la lectura que se hace muy agradable con los temas muy curiosos e interesantes, gran trabajo.
Un fuerte apoyo y cordial saludo.
mucha hipocresía en esta sociedad, hay libertad hasta que se entera el vecino ahí ya miran mal, y no hablo solo de las putas.
Si lo hacen libremente que lo hagan, pero sabiendo los pros y contras
Muy bueno tu articulo , en verdad coincido con muchas de las cosas que comentas en tu articulo.
Hola eva, la verdad es que el tema de la prostitucion da para dialogar y aun mas para reflexionar. He tenido miles de debates acerca de legalizar o no la prostitucion, sobre la linea donde termina la libertad de las mujeres prostitutas y empieza la del hombre que paga por sus servicios, y un largo etc. Cuando indagas un poco aparecen informaciones que no te ayudan mucho a estar a favor de la prostitucion como mujer, ya que la mayoria de ellas son victimas de la trata y otras muchas no estan ahi porque sea su trabajo soñado mas bien por obligacion (y si yo he ido a hablar con ellas, y reciben extorciones por todas partes). Es verdad que no nos podemos olvidar de aquellas mujeres que lo hacen de la forma mas libre posible, siendo concientes de su empoderamiento, libertad sexual, respeto y conciencia. En mi opinion, que siempre puede cambiar y modificarse, no es una profesion que sea a dia de hoy sana para las mujeres, tiene muchos riesgos, tanto fisicos como psicologicos, sobre todo para las que estan a pie de calle. Nos queda mucho por avanzar y EDUCAR, ¿porque las mujeres practicamente no consumimos prostitucion masculina? . Me gusta mucho tu trabajo, sigamos construyendo a traves del dialogo y la reflexion, un beso.
Estoy de acuerdo con con el planteo y la realidad que describe Elena con mucho respeto; de la misma manera, personalmente me hubiera gustado que el artículo justamente siguiera extendiédose allí donde Eva decide cortarlo, cuando toca hablar de las mafias. La prostitución es un tema muy vidrioso, no creo que sumemos al debate con un análisis superficial del asunto, me gustan mucho los artículos de este blog, pero con este en particular me toca disentir. Respecto a mi vida y experiencia yo jamás llamaría puta a una persona ni a mí misma, es un insulto que he escuchado a lo largo de toda mi vida dirigido a mí y todas las mujeres en general y por eso no encuentro razón para apropiarme de ese término o empoderarme desde ahí, aunque no invalido que otras lo hagan, cada una elige cómo quiere definirse y que la llamen. Lo que creo que no está demás recordar es que las prostitutas emponderadas son una minoría privilegiada, el resto es carne esclava de las mafias que se juega su salud, su cuerpo y su vida día a día, hora a hora, polvo a polvo, cliente a cliente, no somos solidarias invisibilizándolas.