El catálogo de juguetes anales es muy amplio, podemos encontrar múltiples tipos de juguetes sexuales para explorar y disfrutar mucho más de la puerta trasera. No importa si eres principiante con esta práctica o si la practicas con frecuencia, seguro que encuentras un juguete que se adapte justo a los que estás buscando.
Cada tipo de juguete anal tiene un objetivo principal y todos son estupendos para personas principiantes y expertas, el único factor a tener en cuenta es el tamaño.
- Bolas anales tailandesas: es una tira larga con bolas progresivas de menor a mayor tamaño ideales para dilatar y estimular.
- Plug anal: de la misma forma que las bolas tailandesas, los plugs anales también están diseñados para dilatar y estimular. Dependiendo de la experiencia con esta practica recomendaremos una cosa u otra. Los plugs tienen una forma cónica que facilita la inserción. Estos juguetes anales son más anchos en la base para evitar que se queden dentro del recto.
- Estimulador prostático: Estos anal toys comparten una forma curvada en uno de sus extremos diseñados especialmente para estimular la próstata.
- Anillo anal: es un juguete que se coloca en la base pene y en algunas ocasiones también en los testículos e incluye un plug anal. Estos juguetes anales están especialmente diseñados para potenciar la erección, retrasar la eyaculación y disfrutar del placer anal al mismo tiempo. Además como deja el pene libre puedes disfrutar del coito, las masturbación o el sexo oral al mismo tiempo.
- Dildo anal: diseñados especialmente para estimular. Aunque algunos modelos están especialmente diseñados para el sexo anal muchos dildos vaginales se pueden utilizar también para la penetración anal. En este caso, de la misma forma que los plugs, es importante que la base sea más ancha para evitar que pueda quedar dentro.
En todos los tipos de anal toys podemos encontrar juguetes con o sin vibración. Si es tu primera vez con un juguete anal, en RedLights te recomendamos que lo utilices sin vibración. Al principio es mejor empezar por acostumbrarse a la sensación e ir añadiendo extras como la vibración conforme aumente la experiencia.